¿Se anima a leer en la escuela a los niños y niñas?. Lamentablemente no y, creemos que si lo hacemos. Leer un libro tiene que ser una actividad placentera, de disfrute para quien lee y también una forma de aprendizaje.
Cada lector/a se implica de manera diferente ya que intervienen diferentes factores externo e internos.
Podríamos apuntar que el proceso lector esta condicionado por una serie de factores como son tipo de texto (significativo o no), contexto (refiriéndonos al lugar), leer para adquirir un aprendizaje o por el mero placer...
En el proceso de enseñanza-aprendizaje de la lectura se prima el proceso como instrucción como vía de aprendizaje en el que el maestro/a da una explicación del texto, de vocabulario y pide contestar algunas preguntas relacionadas con el mismo en detrimento de la actividad lúdica.
Con esto lo que estamos consiguiendo es olvidar para que leemos; distingamos entre un texto escrito explicando a los niños y niñas para qué se lee- explicar algo a sus compañeros o para hacer un examen o leer por el placer,disfrute, diversión; es decir, ofrecer un libro a cambio de nada.
Es verdad que necesitamos que experimenten que la lectura te da la oportunidad de vivir sus historias.
ResponderEliminarfuncionan por imitación, así k es un trabajo de tod@s, en la escuela, en casa....
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